29 de diciembre de 2013

Personas con Alta Sensibilidad

HSP, Gestalt, Aida Bello Canto, El Tornillo Flojo, Alta sensibilidad, Gestalt Integral
La sensibilidad es el punto de inicio esencial para poder entrar en contacto con las propias necesidades internas o externas. Nos posibilita el sentirnos y el sentir el mundo que nos rodea. Nos ofrece información sobre qué nos está pasando en este ahora y en este momento, conmigo mismo/a y con quien me rodea o interactúo, favoreciendo el encuentro o dándome señales de retirada.

Pareciera una obviedad el hablar de la sensibilidad, creyendo que todos la tenemos desarrollada y podemos fácilmente tomar registro de nuestro sentir, ponerle nombre (ansiedad, ternura, agobio, empatía, etc) y tomar acciones en coherencia con lo sentido. ¡Error!

Frecuentemente nos encontramos con dificultades en la sensibilización (primera fase del ciclo de experiencia o contacto, como decimos en Gestalt) donde la persona no puede dar cuenta de su sentir en ciertos momentos; por ejemplo, no registra cuando se enoja, tiene miedo o se conmueve. Difícilmente va a poder satisfacer sus necesidades requeridas en ciertas áreas de su vida o entrar en genuino contacto con otros donde estas sensaciones sean pertinentes. Además, el cuerpo siente aunque la persona no lo perciba, depositando en el mismo sus efectos: a veces corazas, otras somatizaciones.

La buena noticia es que es posible el entrenamiento a través de diferentes modos: aprender a escuchar la señales físicas, distinguir en qué momento aparecen, pulir el alfabeto emocional, etc. Hay ejercicios específicos para desarrollar la sensibilidad, o salir de la desensibilización; ésto lo dejamos para otro día, si les interesa.

También hay personas con alta sensibilidad (Highly Sensitive People) que poseen un sistema nervioso mucho más sensible que el promedio - es innato-, captando las sutilezas de su alrededor y mayor cantidad de información sensorial. Se conmueven profundamente con el arte, la naturaleza, el sufrimiento de los otros; les afecta de sobremanera los ruidos, los olores fuertes, las masas de gente, ...


Los HSP necesitan aprender a darse tiempo para procesar tanta información, (captan rápidamente las necesidades del ambiente, lo que otras personas necesitan) y otorgarse el espacio para armonizarse propiciando que la avalancha de estímulos no los conduzca a la fatiga o al frecuente sufrimiento.

La Dra. Elaine Aron ha investigado en profundidad a las personas con alta sensibilidad, encontrando a dos cada diez personas que lo poseen, sin variación de género ( http://www.hsperson.com).


Poseer una alta sensibilidad puede complicar la vida, tal como la vivimos hoy en día, mas también posee enormes ventajas. Abrazar este rasgo como propio y reconocerse, el cual no se puede cambiar por más que muchos buscan ayuda para "no ser tan sensibles", es el primer gran paso para transformar la complicación en don: creatividad, empatía, flexibilidad, precisión, ... Encontramos en nuestra historia con este rasgo a muchas personas comprometidas con el bienestar de la humanidad y del medio ambiente, pintores, músicos.

No es cuestión de qué es mejor: tener poca sensibilidad, ser promedio o tenerla alta. ¡Sin juicios! Somos, ésta es la grandeza de reconocernos y reconocer al otro. Y cada uno buscará el camino que sienta en mayor sintonía para sumar Vida a sí mismo y a otros.

¡Buen 2014 para todos!

21 de diciembre de 2013

Un modelo para el Bienestar: PERMA

PERMA, felicidad, bienestar, Dra. Aida Bello Canto, El Tornillo Flojo, psicologia positiva
Estamos llegando a este final de año y con toda la movilización que estas fechas traen, se me ocurrió compartir una de las maneras investigadas y estadísticamente corraboradas para aumentar el Bienestar. ¡Una sobredosis no hace daño!

Actualizado: "Felicidad y Bienestar ¡no es lo mismo!"

Dra. Aída Bello Canto
Psicología y Gestalt

8 de diciembre de 2013

La Confluencia, ¡cuando es un pegoteo!

Confluencia, Gestalt, Aida Bello Canto, El tornillo flojo
Hemos tocado el tema de la confluencia en diferentes oportunidades (saliendo de relaciones tóxicas, chantaje emocional), mas en este hoy quiero acercarme desde un punto más cotidiano y no por ello menos molesto: cuando una persona utiliza un "Nosotros" sin habernos consultado; nos involucra en lo que dice o hace como si contara con nuestro apoyo. ¿Les ha pasado?
Por ejemplo:
- "A nosotros nos gusta el cine de acción", ¡menos mal que tengo internet para ver lo que quiero!
- "Somos un grupo luchador", e ignoro cuándo me hice socio/a.

También cuando escuchamos que alguien utiliza este "Nosotros" (explícito o implícito) para referirse a una situación donde ESA persona no tuvo nada que ver, su aporte fue nulo o directamente brilló por su ausencia.
Por ejemplo:
- "Hemos alcanzado un gran objetivo", y a lo mejor hasta puso obstáculos ante el planteo del mismo.
- "Somos un equipo de primera línea", y presenta excusas cuando las papas queman.
- "Hicimos una excelente inversión", y amenazó con que si salía mal ... ¡no pagaba los platos rotos!

La mayoría de las veces permitimos que nos metan en el mismo saco, dejando pasar la situación para no parecer quisquilloso/a, conflictivo/a o hasta individualista (¡qué mala palabra!). Creo que evitamos también poner al otro en un lugar de exposición y hasta quizás evitamos sentir vergüenza ajena. Una vez ... pase ... dos veces ... pase ... ¿tres? ... ¿es el silencio la mejor salida? o lo que es más profundo, ¿qué tratamos de evitar en realidad con nuestro silencio? porque encima está el conocido dicho de que "el que calla, otorga".

La confluencia es un magnífico estado de unión cuando danzamos con la música del contacto y la retirada. Tras haber permanecido en vívido contacto con otro ser humano, la misma posee un enriquecedor significado que es "Nosotros", desde la claridad de cada uno de los seres que se encuentran. Yo me abro a que me conozcas, sepas lo que siento y pienso, y de igual forma deseo que te abras para conocerte, saber desde tí lo que sientes y piensas. En los acuerdos, conjugaremos juntos ese "nosotros", y en las diferencias podremos crecer y fundamentalmente, respetarnos.

¿Cuándo se torna incómoda y tóxica? cuando la confluencia se utiliza y se mantiene para evitar o prevenir el contacto, como en los ejemplos que vimos al principio. Se instala en la persona como manera de no darse cuenta de los límites de contacto, la frontera Yo / no Yo (como denominamos en Gestalt). Hay una pérdida de límites entre uno mismo y el entorno, fundiéndose con el otro. El confluyente confunde identidad con "unión", comulgando - sin diferenciar- con los sentimientos, ideologías y conductas del otro o de su grupo de referencia. Evita los riesgos de diferenciación.

En síntesis, si me enfrento a una situación donde aparece alguien con un "nosotros" que me genera incomodidad pues no estoy de acuerdo con ese pegoteo, además de molestarme con la otra persona y su audacia como respuesta emocional inmediata (cada uno verá si lo aclara a la persona ... o lo deja pasar), he de plantearme a mí mismo/a qué me pasa con el tema de los límites.

Aún cuando no cambie mi forma de responder, sabré un poquito más de mi persona y haré mis elecciones paulatinamente con mayor claridad. ¡Lo cual no es menor!

Ingrediente en los cambios deseados: la Incomodidad.

¡Abrazando la incomodidad en nuestro viaje de cambios! 🙌🙌 La inevitable incomodidad que experimentamos en nuestro camino hacia el cambi...