29 de agosto de 2015

La Flexibilidad Emocional

Aida Bello Canto, Psicologia, Emociones, Gestalt, Actitud Positiva, Inteligencia Emocional
  La flexibilidad emocional se refiere a nuestra capacidad de adaptarnos, ajustarnos creativamente, a los cambios y a situaciones inesperadas. Es uno de los factores que nutre nuestra inteligencia emocional. Cuando aprendemos a gestionar nuestras emociones, darnos cuenta de las mismas, su intensidad y pertinencia con la realidad (con lo que Es y no con lo que imagino), incidimos directamente en nuestros pensamientos y nuestras conductas, aumentando nuestra capacidad de ser flexibles ante los cambios externos e imprevisibles.

Una persona flexible posee una apertura a escuchar, es capaz de tolerar las diferencias y cultiva una actitud positiva ante la vida. Esto no implica el no darle espacio a las emociones displacenteras, pues ya sabemos que todas y cada una de nuestras emociones tiene su importante función de ayuda interna para mostrarnos lo que estamos necesitando.

La flexibilidad emocional nos provee de una gran herramienta para no quedar atrapados en una emoción, aunada a todos los pensamientos que van de la mano con la misma; si estamos enojados, solemos tener pensamientos teñidos por el enojo, en detrimento del otro o de nosotros mismos (auto-reproche), y en consecuencia reaccionamos y nos comportamos desde ese lugar. Sí hemos de darle del espacio a nuestro enojo (miedo/ inseguridad/ tristeza/ etc) mas no quedar sumergidos en sus aguas solamente, dándonos tiempo para registrar qué necesitamos, qué podemos hacer al respecto y ahí ya estamos en búsqueda de alternativas, generando una actitud más ágil y abierta.

Una persona rígida cuenta con muchas menos herramientas para los cambios y retos que nos presenta la vida; comprenderse a sí mism@ y comprender a los demás se torna difícil pues suele basarse en su "mirada del mundo", en sus creencias y juicios. Todo cambio es vivido amenazante, pudiendo evitar/controlar una buena cantidad de ellos, mas otros vienen por sí solos, inevitablemente. Quien peor lo pasa, quien más padece en última instancia es la persona rígida, pudiendo verse afectada su salud física y la calidad de sus relaciones personales.

Algunos de los beneficios de fomentar nuestra  flexibilidad emocional son:  
El Tornillo Flojo, Emociones

- Logra un equilibrio dinámico emocional ante los cambios.
- Significativa detección del stress antes de que se instale.
- Mejor equipamiento para gestionar las incertidumbres.
- Aumenta el autoconocimiento.
- Escucha activa.

Nuestras emociones impactan en nuestra salud, nuestros pensamientos y en nuestra forma de comportarnos. Así que podemos acrecentar nuestra flexibilidad  por alguna de estas áreas, ya que todas están interconectadas gracias a nuestro cerebro y sus químicos. Pensamientos positivos, actitud positiva = + flexibilidad emocional.

Palabra clave: Entrenamiento.¡si hasta para caminar, antes gateamos!

Dra. Aída Bello Canto
Psicología y Gestalt


22 de agosto de 2015

8 Ingredientes para una "Buena Relación"

Aida Bello Canto, Psicologia, Gestalt, Emociones, relaciones nutritivas, bienestar,
Todos queremos tener buenas relaciones en nuestra vida y cuanto más cercana es la persona con la que nos relacionamos, ya sea amigos, familiares y/o pareja, más crece la necesidad de una "Buena relación". Hoy les doy 8 ingredientes que han de estar presentes para que así ocurra, pudiendo ver cuál falta o necesita ser cultivado. El respeto impregna a todos.

1- Existencia del Tú, Yo y Nosotros. Nadie se funde con nadie, no nos volvemos "uno", pues ello implicaría que una de las personas se va "perdiendo a sí mism@" en el otro.

2- ¿Qué es una buena relación para cada uno? Todos poseemos nuestra propia visión e ideas al respecto, la mayoría de las veces muy generalizada sin "detalles",  debido a que no solemos pararnos a reflexionar qué es una "buena relación para mí". El compartir la visión personal entre los miembros de la relación, hace que afinen el propósito común de tener y sostener una relación nutritiva.

3- Crecimiento mutuo, donde cada parte de la relación ayuda a la otra parte a ser lo mejor de sí mism@. Se potencian, se impulsan y se valoran mutuamente.

4- Comunicación clara. Nos acercamos por las similitudes y crecemos en las diferencias. Los desacuerdos no significan conflictos ni quiebres en la relación, sino una oportunidad para conocerse internamente sobre cómo siente y qué piensa cada uno en una situación dada. El sentirnos escuchados y respetados mutuamente, nos nutre vigorosamente.

5- Dedicar tiempo y atención a la relación. Con frecuencia nosotros los Humanos damos por hecho que cuando tenemos algo "bueno",  se mantiene y permanece por sí solo. Esta misma premisa no la aplicamos en objetivos laborales o de crecimiento en otras áreas, ya que sabemos que sin dedicarle tiempo y atención difícilmente alcanzaremos nuestros objetivos: lo mismo pasa en nuestras relaciones.

6- Juntos frente a los desafíos que trae la vida misma. Son instancias que posibilitan el crecimiento y fortalecimiento de la relación, apoyándose mutuamente, cada uno brindando lo mejor de sí. Poseer la sabiduría de buscar ayuda o herramientas externas siempre que sea necesario, pues no nacemos sabiendo TODO, ni somos omnipotentes.

7- Apoyar el desafío personal de uno de los miembros de la relación. Este tipo de apoyo, principalmente en las relaciones de pareja,  muchas veces requiere cambios de algún tipo de la otra parte, no solamente basta el escuchar y respetar el desafío personal de la otra persona, sino que implica que acompañe con acciones. Por ejemplo, si "A" necesita realizar un curso o cambio de trabajo para sentir que crece internamente o profesionalmente, esto supondrá que "B" revise cómo colaborar para facilitar su concreción.

8- Disfrutar, compartir encuentros, algún hobby común, una pasión. Presencia del buen humor; que el estar con el otro sea una renovada elección.

¿Quieres alcanzar y crecer en tu objetivo/propósito/ proyecto? Ponlo en tu foco de atención (la intención ya la tienes) y "trabaja" para ello. ¿Quieres una buena relación? Ponla en tu foco de atención (la intención ya la tienes) y "trabaja" para ello!

Dra. Aida Bello Canto
Psicología y Gestalt


9 de agosto de 2015

Cuando "Estoy Bien", es Autoengaño o Anestesia Emocional.

Psicologia, Gestalt, Emociones, Aida Bello Canto, Anestesia Emocional, Dependencia emocional
Muchas veces ante la pregunta de "¿cómo estás?", la persona suele contestar "estoy bien", pudiendo ser una respuesta automática social que a veces coincide con la realidad sentida de la persona, u otras tantas está muy lejos del sentir, mas opta por variadas situaciones, en decir "Estoy bien".
No me quiero meter en el día de hoy con esta respuesta cliché social, que posee su razón de ser claramente (no andamos diciéndoles a todos los que nos preguntan cómo nos sentimos internamente).

Mi objetivo en este hoy es revisar en dos niveles este "Estoy bien" que puede traer problemas con el tiempo a la persona que se acostumbra a responder de tal manera, sin consultarse internamente si coincide con la verdad (su verdad emocional interna), o responde usualmente a un otro con el cual sí tiene una relación o vínculo, sabiendo que NO ESTÁ BIEN, para evitar posibles conflictos.
¡Y en verdad, no evita nada, solamente posterga!

Aparece el autoengaño cuando la persona reconoce sus emociones, en una situación dada, mas elige no decir lo que le pasa, callarse y comunicar un "Estoy bien". El autoengaño nace en la creencia de que dejando pasar la situación, logra evitar una situación incómoda por lo menos, para no decir provocar un conflicto. ¨Generalmente la emoción que se esconde es el enojo, mas si nos revisamos internamente con transparencia, sabemos que vamos acumulando adentro dosis de incomodidades, que luego encuentran su salida: 1) en el afuera, explotando en otro momento con dimensión inadecuada, o 2) en el adentro, somatizando con tensiones o la personal manera de ponerlo en el cuerpo (migrañas, dolor de estómago, ...).

Acá el antídoto es aprender a comunicarnos con claridad, con cuidado hacia el otro y hacia uno mismo. Si algo te incomoda, ¡dilo! el otro no es adivino. Si algo te enoja, ¡dilo! sino se repetirá una y otra vez la misma situación ... y como "estás bien" ... no hay cambios!!

Aparece la anestesia emocional cuando la persona no reconoce las emociones que se hacen presentes en una situación específica, pues ya ha aprendido a silenciar su sentir para beneficio del sostenimiento de una relación. Paulatinamente las emociones de miedo y/o enojo se han ido adormeciendo, a través de justificar al otro, asegurarse el mantenimiento del vínculo, y se acomoda emocionalmente a "este estilo de vida". La anestesia emocional es una de las causas del porqué la dependencia emocional se va instalando poco a poco y lleva mucho tiempo el descubrir que nuestra relación está intoxicada.

Acá el antídoto es empezar a darnos un tiempo a solas para consultarnos internamente cómo nos sentimos en realidad, preguntarnos qué nos provoca tal o cual situación específica; suele ser una gran herramienta el guiarnos por lo que nos pasa corporalmente, pues podemos no registrar la emoción que tenemos, mas nos encontramos con que nos duele "esto o lo otro", cada vez que ... Si prestamos atención y nos damos ese  pequeño espacio de auto-registro, podremos empezar a registrar nuestro genuino sentir.
Una vez logrado tomar registro de lo que siento, se suele pasar a mantener el silencio para poco a poco aprender a comunicar al otro lo que me pasa, mi auténtico sentir.

En esencia, el habitar un constante "estoy bien" por las razones enunciadas, esconde un genuino "no estoy bien", y si no doy ningún paso, no lograré ningún cambio ni en mí ni en la relación. Y si no elegimos cambiar, pues que sea una elección personal; ¡merece todo el respeto!

¡Hasta el próximo encuentro!

Dra. Aida Bello Canto
Psicología y Gestalt

¡¡Usa tu detector emocional!!

¡Poderosa herramienta nuestra! ⭐️ El detector emocional que hemos creado a partir de nuestras experiencias nos brinda la valiosa capacida...